Aspectos básicos del cáncer

El cáncer es un nombre amplio para una enfermedad que comienza cuando las células mutadas crecen de manera anormal y fuera de control. Puede comenzar prácticamente en cualquier parte del cuerpo (porque tenemos billones de células). Los ciclos celulares normales nos ayudan a mantenernos sanos. Las células nuevas crecen, las células viejas mueren, y así continúa el proceso. Si ciertas células se dañan y no mueren (como deberían), es posible que se desvíen cada vez más. Además, como las células sanas continúan creciendo para poder reemplazar aquellas células viejas o dañadas, el cuerpo puede terminar con demasiadas, y esas células adicionales pueden dividirse y replicarse, lo que podría formar un tumor. A veces, ese tumor es benigno (no canceroso), pero, otras veces, puede ser maligno (canceroso).1

El objetivo central es detectarlo a tiempo. A continuación, se incluye mucha información sobre cómo puedes mantenerte al tanto de tu salud con pruebas de detección preventivas y periódicas de cáncer, siempre que estén disponibles. Además, obtén consejos sobre cómo reducir el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer. Afrontar un diagnóstico de cáncer puede generar una variedad de emociones y preocupaciones. Obtener información básica sobre cada uno de los diferentes tipos de cáncer les resultará útil a ti, a tu familia y a tus amigos para comprenderlo y afrontarlo mejor. 

Cáncer de mama

El cáncer de mama es el más frecuente entre las mujeres.2 La clave para la detección y el diagnóstico a tiempo es conocer las pruebas de detección y los exámenes disponibles y saber cuál puede ser mejor para ti. Por ejemplo, las mamografías, los exámenes clínicos de mama, los autoexámenes, las ecografías y las imágenes por resonancia magnética (IRM) son herramientas que permiten detectar, a tiempo, signos de cáncer de mama y lograr que el tratamiento sea más eficaz. Asegúrate de conversar sobre las pruebas de detección del cáncer de mama con tu médico. Tu salud, los antecedentes familiares y los factores de riesgo influyen a la hora de determinar cuándo hacerse pruebas de detección periódicos.

Cáncer de cuello uterino

Existen dos pruebas de detección importantes que ayudan a detectar el cáncer de cuello uterino: la prueba de Papanicolaou y la prueba del virus del papiloma humano (VPH).3 Como los cánceres y precánceres de cuello uterino en etapa inicial, por lo general, no causan síntomas, es importante hacerse las pruebas de detección con regularidad para detectar signos de cáncer antes de que se propague. La buena noticia es que, probablemente, solo necesites hacerte una de esas pruebas de detección. Además, si los resultados son buenos, quizá, puedas esperar algunos años entre prueba y prueba.Conocer los factores de riesgo y lo que puedes hacer para prevenir el cáncer de cuello uterino ayudará a la hora de obtener buenos resultados en las pruebas.

Quimioterapia

La quimioterapia (también llamada "quimio") es un medicamento que utiliza sustancias químicas naturales y artificiales para eliminar las células de rápido crecimiento en el cuerpo, como los cánceres. La quimio se puede utilizar sola o junto con otros tratamientos. A menudo, se usa para reducir un tumor antes de la cirugía o la radiación, eliminar las células cancerosas restantes después de la cirugía o la radiación, mejorar otros tratamientos contra el cáncer o eliminar las células cancerosas que han reaparecido o se han diseminado.4 La quimioterapia es eficaz, pero puede causar efectos secundarios (como la caída frecuente del cabello). Conozcamos los tipos de quimioterapia y lo que puedes esperar si tú o un ser querido reciben tratamientos de quimioterapia.

Cáncer colorrectal (colon)

El colon (intestino grueso) es el órgano principal del tracto digestivo. Hace todo el trabajo para que el cuerpo pueda absorber los nutrientes de los alimentos y eliminar lo que no necesitamos. El cáncer de colon aparece cuando se forman pólipos en el colon o el recto y, con el tiempo, se convierten en cáncer. Las pruebas de detección periódicas y otras pruebas pueden ayudar a detectar pólipos sospechosos a tiempo, antes de que se conviertan en un problema. Habla con tu médico sobre qué prueba podría ser mejor para ti y cuándo deberías hacértela; luego, asegúrate de hacer un seguimiento para reducir el riesgo con el tiempo.

Cáncer de pulmón

El cáncer de pulmón no solo se aparece en las personas que fuman cigarrillos. Cualquier persona expuesta a toxinas dañinas podría presentar tumores en el pecho. Gracias a los avances en la detección y el tratamiento a tiempo, el número de casos está disminuyendo.5 Además, existen varios factores de riesgo que están bajo tu control (como el tabaco y la exposición a sustancias químicas). El médico determinará si corres un alto riesgo de padecer cáncer de pulmón y qué puedes hacer para detectarlo a tiempo.

Cáncer bucal

El cáncer bucal es un tipo de cáncer de cabeza y cuello en el que crecen células malignas en la boca. El cáncer bucal no es un único cáncer. Es un grupo de cánceres que aparecen en varias áreas de la boca. En el caso del cáncer bucal, la detección a tiempo es importante porque, a medida que se produce, puede penetrar más profundamente en el tejido y extenderse a otras áreas del cuerpo. Conoce los tipos de cáncer bucal, los factores de riesgo y cómo prevenirlo.

Cáncer de ovarios

El cáncer de ovario aparece en los ovarios o las trompas de Falopio. Y, como estos tumores están ocultos dentro del sistema reproductivo femenino, es posible que no se detecten a tiempo. Sin embargo, se pueden utilizar exámenes pélvicos, imágenes y análisis de sangre para detectar los primeros signos a tiempo. Si bien no hay forma que garantice su prevención, algunos hábitos y acontecimientos de la vida pueden ayudar a reducir el riesgo.

Cáncer de próstata

La mayoría de los casos de cáncer de próstata crecen lentamente con el tiempo, razón por la cual las pruebas de detección periódicas y a tiempo son tan importantes. Por lo general, una vez que los hombres cumplen 50 años, su médico puede recomendar pruebas de detección de rutina. Y, como solo los tumores avanzados suelen causar síntomas, no siempre puedes confiar en que el cuerpo te dirá si algo anda mal. Habla con tu médico sobre qué hábitos pueden ayudarte a reducir el riesgo y cuándo comenzar a realizarte pruebas de detección periódicas.

Cáncer de piel

Si creciste pasando mucho tiempo al sol, puede que sea el momento de empezar a pensar en la salud de la piel. Si bien podemos beneficiarnos de una buena dosis de vitamina D, muchos de nosotros terminamos con una exposición dañina al sol durante nuestra vida, lo que daña nuestra piel y puede provocar cáncer de piel. Los autocontroles y las visitas periódicas al dermatólogo son dos maneras de estar alerta ante cualquier cambio sospechoso en la piel. Además, se puede prevenir el daño solar en el futuro de muchas maneras. 

Cáncer testicular

El cáncer de testículo comienza en el sistema reproductivo masculino y, en realidad, es bastante raro. Los autocontroles y los exámenes periódicos que realiza el médico son formas de detectar un posible cáncer a tiempo (como un bulto). O bien, puede que notes ciertos signos y síntomas que podrían estar relacionados con el cáncer de testículo. Escuchar al cuerpo, realizar un seguimiento de los cambios y conocer tus factores de riesgo puede ayudarte a mantener el control y la salud de tus genitales.