5 razones para cocinar en familia
Con agendas de trabajo ocupadas, deportes después de la escuela, citas para jugar y más, puede ser difícil encontrar tiempo para simplemente estar juntos como familia. Una forma inesperada de pasar tiempo de calidad es en la cocina. Y hay algunos beneficios importantes al hacer que la preparación de comidas sea un asunto familiar, ya sea que tu ayudante de cocina sea un pequeño en edad preescolar o un adolescente más alto que tú. Sigue leyendo para conocer las 5 principales ventajas de cocinar en familia.
1. Crear vínculos a largo plazo
Pasar tiempo de calidad con tus hijos fomenta la conexión y la conversación. Y eso es tan cierto cuando tu familia está pelando patatas como cuando se acurrucan juntos a leer cuentos antes de dormir. A medida que los niños pequeños se convierten en adolescentes, las familias tienden a pasar más tiempo separadas. Por lo tanto, cocinar (junto con actividades como andar en bicicleta, jugar o caminar) puede ser una manera ideal de aumentar la cercanía.1
Pasar tiempo de calidad con tus hijos fomenta la conexión y la conversación. Y eso es tan cierto cuando tu familia está pelando patatas como cuando se acurrucan juntos a leer cuentos antes de dormir. A medida que los niños pequeños se convierten en adolescentes, las familias tienden a pasar más tiempo separadas. Por lo tanto, cocinar (junto con actividades como andar en bicicleta, jugar o caminar) puede ser una manera ideal de aumentar la cercanía.1
2. Perfeccionar las habilidades matemáticas de tu hijo
A medida que aprenden a cocinar, los niños también adquieren habilidades valiosas, como la resolución de problemas. Cocinar también es bueno para el cerebro. Ayuda a los niños a mejorar el pensamiento crítico y las habilidades matemáticas.2 ¿Cómo puede la cocina hacer todo eso? Bueno, piensa en lo que implica preparar un plato. Debes leer la receta, medir los ingredientes y calcular el tiempo de cocción.
Y para los más pequeños, todo el proceso de revolver y verter puede fortalecer la coordinación ojo-mano y la motricidad fina.
3. Mantener vivas las tradiciones alimentarias
Involucrar a tu familia en la preparación de recetas familiares puede ser una excelente manera de honrar tus raíces culturales. Transmitir recetas de tus padres y abuelos puede ayudar a tu familia a fortalecer la conexión con el pasado.2 Si no tienes recetas familiares, visita el sitio del Departamento de Agricultura de EE. UU. Allí encontrarás colecciones de recetas diversas y saludables de diferentes culturas, desde nativas americanas hasta filipinas.
4. Aumentar la confianza de tus hijos en sí mismos
Según la American Academy of Pediatrics, cocinar fortalece los pilares de la confianza del niño en sí mismo3:
- Propósito: canalizar la energía hacia un logro
- Competencia y orgullo: resolver problemas y ver resultados
- Confianza: los estás empoderando para tomar decisiones que afectarán la comida
- Responsabilidad: estás demostrando que tienes confianza en que pueden completar las tareas
- Contribución: participar en la preparación de comidas de manera significativa
5. Criar una persona que coma de manera saludable para toda la vida
Incluso el comensal más exigente tiene más probabilidades de probar un plato nuevo cuando participa en su preparación. Pero aprender a cocinar también puede formar miembros de la familia que no sean quisquillosos a la hora de comer. Los adolescentes que conocen la cocina se convierten en adultos que cocinan (y comen) verduras, comen menos comidas rápidas y comen en familia con más frecuencia.4
Así que reúne a tu familia y dirígete a la cocina. Elige una receta que creas que les gustará a todos, asigna tareas a los niños y trabajen juntos para preparar una comida. Te alegrarás de haberlo hecho.