6 pasos para mantener a toda la familia en movimiento
Los beneficios del tiempo en familia son claros. Pasar tiempo regularmente con tus hijos mejora su sensación de bienestar e incluso ayuda a entablar vínculos familiares.1
Dedica ese tiempo a moverse, y es posible que esas ventajas solo aumenten, en beneficio de toda la familia. Según estudios, se ha demostrado que el acondicionamiento físico en familia mejora la comunicación y las habilidades para resolver problemas entre los miembros de la familia.2 También puede mejorar la autoestima de los hijos, el desempeño escolar, la atención y la conducta.3
"Esas son cuestiones que serán útiles para tus hijos durante toda su vida", afirma Pete McCall, especialista certificado en fuerza y acondicionamiento físico.
Y ni hablar de los beneficios para la salud. Para la salud general, la Organización Mundial de la Salud recomienda que los niños de 5 a 17 años realicen al menos 420 minutos por semana o 60 minutos de actividad física de moderada a intensa por día.4
Mientras tanto, los adultos deben realizar al menos de 150 a 300 minutos de ejercicio aeróbico moderado o de 75 a 150 minutos de actividad aeróbica intensa por semana, que podría incluir una combinación de ambos, además de al menos 2 días por semana de entrenamiento de fuerza.4,5 Puedes dividir este tiempo en pequeños segmentos que te convengan.
Hacer ejercicio juntos puede ayudar a todos a alcanzar esos objetivos. Además, cuando los niños son activos, tienden a seguir siendo activos durante toda su vida.6
Se sabe que ser más activo ayuda a los adultos a dormir mejor, mejorar la capacidad de atención y aumentar el bienestar general.7 Y todos esos beneficios pueden ayudar a los padres a afrontar los difíciles momentos de criar a sus hijos.
Estas son 6 ideas para que toda la familia se ponga en movimiento:
Recuerda la sigla EMARO
Los expertos recomiendan utilizar el marco EMARO para los objetivos. EMARO significa Específico, Medible, A lcanzable, Realista y Oportuno.8
Cuando una meta cumple con estos criterios EMARO, es factible para ti y tu familia. Intenta establecer una meta cada semana que sea alcanzable de acuerdo con el horario de tu familia. Lo que importa es la constancia: hacer algo todos los días.
Por ejemplo, completa este desafío haciendo ejercicio en familia durante 30 minutos por día (específicos y medibles). Es aceptable dividir los 30 minutos en períodos más breves (alcanzables), como 10 minutos por la mañana cuando recoges a los niños de la guardería o después de cenar. Apunta a 30 minutos en total.
¿Qué sucede con la parte "realista"? Asegúrate de que la familia decida en conjunto cómo ser activos, para que sea posible para todos. Te ayudará a prepararte para el éxito.
Jueguen con todos los niveles de habilidades
Al planificar actividades físicas en familia, piensa si son factibles para todos los miembros de tu familia. Si una determinada actividad es demasiado difícil o complicada (piensa en el tenis en comparación con el bádminton), puede ser una experiencia frustrante para los niños. Por supuesto, es posible que no te des cuenta de que la actividad está fuera de tu alcance antes de intentarla. Si ese es el caso, "deja que los niños se sientan orgullosos de ellos por intentarlo, incluso si les resulta difícil", comenta Teresa L. Lovins, médica, miembro de la junta directiva de la American Academy of Family Physicians.
Si algún miembro de la familia tiene afecciones de salud crónicas o discapacidades, no es necesario excluirlo. Habla con tu proveedor sobre qué actividades son seguras y cuáles podrías necesitar modificar.
Ten en cuenta los intereses de todos
El hecho de que todos los miembros de la familia puedan realizar una actividad no significa que todos disfrutarán haciéndola. Anima a tu familia a sugerir actividades e incorporar sus ideas en tu plan semanal.
"Es especialmente importante lograr que los niños participen en el proceso para tomar decisiones", señala McCall. "Les permite asumir responsabilidad", dice. Puede ayudarles a sentirse más entusiasmados cuando prueban una actividad.
Intenta no obligarlos
Si bien el objetivo es lograr que participe toda la familia, obligar a los niños a realizar actividades que realmente no les interesan puede desanimarlos en general. Incorpora las ideas de todos y busca formas de hacer que las actividades sean divertidas. Un juego de persecución, por ejemplo, puede ser una buena opción un día, o patear la pelota podría funcionar otro día. Incluso los paseos regulares con el perro cuentan. El objetivo es hacer latir el corazón de todos mientras se divierten.
Da a los niños tiempo libre para jugar
"Los niños necesitan una combinación de actividades estructuradas y juego libre.9 Entonces, si bien es excelente planificar entrenamientos y juegos con tus hijos, también es bueno darles tiempo libre durante el cual pueden estar activos", explica McCall, quien pone en práctica esta recomendación con sus hijos.
McCall impone cierta estructura al permitirles elegir entre 3 opciones. Por ejemplo, ¿quieren ir a la playa, recorrer senderos o ir al parque? A partir de ahí, pueden decidir qué hacer.
Mantente positivo
Sobre todo, cuando sugieras actividades a tu familia, preséntalas como una oportunidad para divertirse y para que todos se sientan lo mejor posible.
"Animo a los padres a centrarse en los aspectos positivos de estar activos, como centrarse en estar sanos y fuertes", dice Lovins. "Lo más importante es animar".