Ayudamos a un niño a experimentar el mundo con audífonos

La historia de Noah

Raquel Olivas recuerda el emotivo momento en el que su hijo Noah finalmente pudo escuchar el mundo que lo rodeaba: los sonidos que muchos de nosotros damos por sentados.

“El primer día que lo trajimos a casa con sus audífonos, nos sentamos en el columpio del jardín y, de repente, se escuchaban pájaros cantando, y él saltó de la hamaca, corrió y dijo: ‘Puedo escuchar los pájaros, mamá. ¡Escucho los pájaros!’”, recuerda entre lágrimas. Y agregó: “Estaba muy entusiasmado. Y realmente me impactó”.

Había sido un largo viaje para Noé, que ahora tiene 8 años, para finalmente obtener la ayuda que necesitaba con su audición.

Raquel y su esposo Miguel Herrera dijeron que, después de su nacimiento, Noah no pasó la prueba de audición dos veces, pero que les dijeron que probablemente solo se trataba de líquido en los oídos. Después de que Noah comenzó la escuela y no pasó otra prueba de audición, Raquel lo llevó a un especialista que le diagnosticó hipoacusia.

“Es grave en un oído y moderada en el otro”, contó Raquel. “Y no sabemos por qué, y no sabemos si va a empeorar, pero decidimos ponerle unos audífonos”, agregó.

A través de UnitedHealthcare Children’s Foundation (UHCCF), la familia de Noah calificó para recibir una subvención que los ayudó a cubrir el costo de los audífonos. Desde 2005, UHCCF ha otorgado más de 37,000 subvenciones por un valor de más de $75 millones. Los fondos pagan los gastos médicos de los niños que no cubre o no cubre por completo un plan de seguro de salud comercial.

“La subvención de UnitedHealthcare Children’s Foundation definitivamente nos dio tranquilidad”, comentó Raquel.

“Obtener apoyo para su audición ha marcado una gran diferencia para Noah”, contaron sus padres.

“Al tener audífonos, está más involucrado en la clase y puede escuchar a su maestra… y creo que esto realmente hizo que sus habilidades para la lectura cobraran vuelo”, afirmó Miguel.

Noah está en tercer grado, pero ya lee al nivel de sexto grado. Sus padres dicen que los audífonos le han dado más confianza, tanto en el aula como en el ámbito social.

“Le ayuda a tener más confianza porque antes no podía escuchar y se sentía intimidado”, manifestó Miguel. Y añadió: “Ahora… puede conectarse con las personas y participar en conversaciones o jugar, y sentirse cómodo consigo mismo”.

¿Es tu hijo elegible?

  • Los beneficiarios de las subvenciones deben tener 16 años o menos al momento de la solicitud.
  • Deben cumplir con los requisitos de ingresos elegibles.
  • Deben ser niños bajo la atención de un profesional médico autorizado con servicios prestados dentro de los Estados Unidos.
  • La cobertura principal para un niño debe ser mediante un plan de salud comercial, ya sea a través de un empleador o adquirido en forma individual. Se admite un seguro secundario a través de Medicaid o el programa de seguros médicos infantiles CHIP.
  • No hace falta que los niños estén asegurados por UnitedHealthcare.

¿Conoces alguna familia que podría beneficiarse de una subvención médica para niños?UnitedHealthcare Children’s Visita UHCCF.org para obtener más información sobre cómo presentar una solicitud.

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