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Los altibajos del cuidado

Fecha de la publicación: 05 de abril de 2021

Última fecha de actualización: 06 de diciembre de 2022

Brindar servicios de cuidador es valioso y puede ser muy gratificante. Pero definitivamente no es algo fácil. Las personas con doble elegibilidad para Medicaid y Medicare pueden tener afecciones graves. Y las exigencias constantes de cuidar a una persona con necesidades especiales pueden significar un costo emocional. Su rol como cuidador puede ser más exitoso y gratificante si sabe cómo hacer frente a sus sentimientos.

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Estas son emociones comunes que sienten los cuidadores:

a. Algunos días son mejores que otros
b. Sé que mi rol es valioso, pero a veces puede ser frustrante
c. A veces me siento culpable por tener sentimientos negativos sobre el cuidado
d. Todas las opciones anteriores

Si eligió la opción "d", no está solo. Brindar cuidados a menudo conlleva altibajos. Las altas pueden proporcionar energía, pero las bajas pueden ser agotadoras. Los pensamientos y sentimientos negativos también son normales. Pero es necesario abordarlos. Ignorar las emociones negativas puede derivar en problemas para dormir, abuso de sustancias, sobreingesta y enfermedades. Cualquiera de estos problemas puede hacer que brindar cuidados se vuelva más difícil y menos agradable. La forma en que enfrente sus sentimientos puede hacer que su rol como cuidador sea más exitoso.
 

Habilidades para ayudar a los cuidadores

Puede ser difícil lidiar con las emociones propias cuando se trabaja arduamente para cuidar a otra persona. Pero es importante que aborde sus sentimientos. Estrés, fatiga y culpa de los cuidadores. Estas son algunas de las emociones más comunes que sienten los cuidadores. A continuación, encontrará habilidades que lo ayudarán a abordar estas y otras emociones.

Sentimiento

Maneras de ayudar a enfrentarlo

Estrés

Cuidar a una persona que padece una enfermedad, lesión o discapacidad puede ser un desafío. Y eso puede ser estresante. A veces, el estrés del cuidador puede generar otros problemas de salud, como depresión o ansiedad.

Trate de mantener un horario regular para las comidas y la hora de acostarse. Duerma una cantidad adecuada de horas (de 7 a 9) por noche. Realice caminatas y trate de dejarse tiempo durante el día para hacer respiraciones profundas, estiramientos o meditaciones.

Fatiga (cansancio)

La fatiga o agotamiento del cuidador se produce cuando los cuidadores quedan agotados mental, emocional y físicamente. Esto puede generar sentimientos negativos y resentimiento.

La sensación de estar abrumado, de no estar preparado o de no tener otra opción que ser cuidador pueden causar fatiga. Enfóquese en cuidarse y pida ayuda.

Ira

A veces, puede ocurrir que la persona que cuida no se sienta agradecida o incluso puede que no quiera su ayuda. Esto puede dificultar aún más la tarea. A menudo surgen tensiones y brotes.

Perdónese. Aprenda a tomar distancia y esperar. También puede ser útil hablar con alguien que le permita desahogarse sobre los motivos que desencadenan sus sentimientos de ira.

Depresión

Sentimientos de desesperanza o desamparo, tristeza, dificultad para dormir y ansiedad. Todos estos son síntomas de depresión. Los cuidadores pueden estar en riesgo de sufrir depresión, por lo tanto, considere cómo se siente día a día.

Si se siente deprimido, tómelo con seriedad. Programe una cita con su médico o con un profesional de salud mental. El ejercicio, la terapia y los medicamentos pueden ayudar a tratar la depresión.

Temor

Sentirse responsable por la salud y el bienestar de otra persona puede causar ansiedad o temor en los cuidadores.

Contar con un plan de respaldo puede ayudar a disminuir la ansiedad. Busque una persona que pueda ocupar su lugar una hora al día. Además, hable con alguien de su confianza sobre sus preocupaciones.

Culpa

La culpa es común en los cuidadores. Esto se debe a que, con frecuencia, pensamos que deberíamos estar haciendo un mejor trabajo. O que deberíamos amar nuestro trabajo como cuidadores en todo momento. O que nunca deberíamos sentirnos impacientes o irritados. La lista continúa.

Tómese las cosas con calma y establezca estándares realistas. El objetivo no es la perfección. Siéntase orgulloso por querer ser un excelente cuidador. Pero permítase un poco de flexibilidad cuando no consiga la excelencia.

Celos

Sentir resentimiento o envidia forma parte de la naturaleza humana. Los cuidadores pueden sentir celos de los amigos que tienen mayor libertad diaria. O de parientes que viven lejos y no tienen que compartir el cuidado.

Los celos surgen. Pero trate de evitar enfocarse en pensamientos de celos. En cambio, intente concentrarse en lo que sí tiene. Sentir gratitud por lo que tiene puede ayudar a revertir sentimientos de envidia.

Recursos para ayudar a los cuidadores

Para muchas personas, convertirse en cuidador es frecuentemente una experiencia nueva. Es comprensible que a veces se sienta inseguro o abrumado. Por eso, es importante saber a dónde acudir en busca de ayuda. En el sitio web de UnitedHealthcare encontrará información y recursos valiosos que lo ayudarán en su recorrido como cuidador.

United Healthcare también ofrece planes de salud de doble elegibilidad, o planes duales para necesidades especiales, para ayudar a personas que califican para recibir tanto Medicaid como Medicare. Las personas con doble elegibilidad para Medicaid y Medicare a menudo tienen necesidades médicas por condiciones crónicas graves. Los planes de salud de doble elegibilidad están diseñados para simplificar la vida de los miembros. Asimismo, pueden simplificar la vida de los cuidadores. Estos planes facilitan la coordinación de cuidados de personas que necesitan múltiples médicos, especialistas y servicios de atención.

Los beneficios de los planes de doble elegibilidad o de Medicaid pueden variar según su lugar de residencia. Busque por su código postal para encontrar el plan adecuado para satisfacer sus necesidades de atención de la salud.

¿Tiene más preguntas?

Estamos aquí para ayudarlo

Comuníquese con nosotros llamando al siguiente número:
1-844-812-5967 / TTY: 711
De 8 a. m. a 8 p. m. (hora local), los 7 días de la semana.

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